Saturday, March 7, 2009

La moda se impone a la Cultura


La moda sobre la cultura o
Los lectores, la moda y la cultura
La moda sobre la cultura cada vez hace más evidente sus estragos. Y los libros son un buen ejemplo de ello, tanto por los temas a que se apuntan algunos escritores como a los títulos que no paran de comprar los lectores.
Los clásicos y la literatura de calidad empiezan a ser para pedantes y la vida de los nuevos buenos libros se abrevia.
Es el imperio de los best sellers de dudosa calidad, de los libros mediáticos, de lo que toca leer para no quedar fuera del momento (para no estar “out”). Al ser humano le gusta que le cuenten historias; es una de las necesidades inherentes a la especie. A nivel individual y a nivel de un país, la moda es inversamente proporcional a la cultura: cuanto mayor es la base cultural, menor es la fuerza de la moda, que se vuelve avasalladora si dicha base es ínfima.
Esta regla rige en todos los campos, y se detecta de forma muy evidente en el lenguaje, donde las palabras comodín y los giros de nuevo cuño invaden de inmediato el habla de las personas poco preparadas, o de los más jóvenes, y casi no afectan a la gente culta; o en el vestir, donde son también los muy jóvenes y menos educados los que se apuntan a ciegas en lo que les dicen que se va a llevar aquella temporada, por disparatado que sea y aunque personalmente no les favorezca en absoluto.
¿Qué ocurre en el ámbito de la lectura? Creo que en este ámbito las consecuencias del desmesurado predominio de la moda son terribles. He leído artículos donde los editores informan que las ventas de los títulos de éxito, de los best sellers, se han duplicado, mientras que las ventas de los otros títulos van camino de reducirse a la mitad.. En España, Estados Unidos o Mexico, no se venden más libros, se venden más best sellers. Unos pocos títulos se convierten en objetos obligados de consumo: todo el mundo los debe tener, todo el mundo los debe haber leído. La mayoría de gente lee “lo que toca” y “cuando toca".
Si comentas que estás leyendo un clásico, te consideran pedante o excéntrica; si dices estar leyendo un libro publicado hace cuatro o cinco años, les admira que sufras tamaño retraso en tus lecturas.

“Los libros tienen cada vez menos vida… Antes cabía la posibilidad de que un libro fuera ganando sus lectores, tuviera un crecimiento paulatino a lo largo de una cantidad de tiempo apreciable, mientras que ahora da la impresión de que no… Hay ese afán de la gente de leer lo que todo el mundo lee a la vez, de leerlo en el momento en que toca leerlo, que es el momento de su publicación.
Entonces, los enemigos reales de los buenos libros no son el cine, ni la televisión, ni los nuevos medios de contar historias: son los best sellers de poca o nula calidad, apoyados por premios literarios “patito” y promociones millonarias, son ese horror de libros que llamamos “mediáticos". Lo que en definitiva esta acabando con la cultura literaria de las personas, es decir, “el predominio absoluto de la moda sobre la cultura”.

Saturday, February 14, 2009

Pensamiento.....Ernesto Sabato



"Es curioso, pero vivir consiste en construir futuros recuerdos de otros tiempos; ahora mismo, aquí frente al mar, sé que estoy preparando recuerdos minuciosos, que alguna vez me traerán la melancolía y la desesperanza."
(El túnel. Ernesto Sábato)

Bernhard Schlink: “El Lector”.-





Frases de “El Lector”:
“Ésas eran mis cavilaciones; convertí mi deseo en factor de un extraño cálculo moral y así acallé mi mala conciencia. Reconozco el mismo esquema por medio del cual el pensamiento y la acción se han juntado o han divergido durante toda mi vida”…
“No quiero decir que el pensamiento y la decisión no influyan para nada en la acción. Pero la acción no se limita a llevar a cabo lo que he pensado y decidido previamente. Surge de una fuente propia, y es tan independiente como lo es mi pensamiento y lo son mis decisiones… Acabé dejando de hablar. Lo que cuenta no son las palabras, sino los hechos; así que, bien mirado, ¿para qué hablar?”.
“A veces un final doloroso hace que un recuerdo traicione la verdad pasada. A lo mejor es que la única felicidad verdadera es la que dura siempre. Porque sólo puede tener un final doloroso lo que ya es doloroso de por sí, aunque no fuéramos conscientes de ello, aunque lo ignorásemos. Pero, un dolor inconsciente e ignorado, ¿es doloroso?”…
“La mirada de Hanna lo registraba todo. Paseaba la mirada por las estanterías de libros que colmaban las paredes. Luego pasó lentamente el dedo índice de la mano derecha, a la altura de su pecho, por los lomos de los libros, pasó a la estantería siguiente, pasó el dedo otra vez, lomo tras lomo, y así recorrió toda la habitación. Al llegar a la ventana se detuvo y se quedó contemplando la oscuridad, el reflejo de las estanterías y su propia imagen reflejada en el cristal… Es una de las imágenes que me han quedado de Hanna. Las tengo guardadas, puedo proyectarlas en una pantalla y contemplarlas, siempre invariables, sin señal de desgaste”.
“En el breve instante en que aparté la vista; Hanna se fue… Después de marcharse Hanna de la ciudad, estuve un tiempo buscándola por todas partes, hasta que me acostumbré a que las tardes carecieran de forma, y hasta que pude ver un libro y abrirlo sin preguntarme si sería una buena lectura para Hanna”…

Friday, February 13, 2009

UN PREMIO CERVANTES ARGENTINO VA POR EL NOBEL DE LITERATURA 2009...DON ERNESTO SABATO!

UN PREMIO CERVANTES ARGENTINO

El novelista y ensayista argentino Ernesto Sábato, nacido en Buenos Aires hace 96 años, obtuvo el Premio Miguel de Cervantes en 1984. Su obra se caracteriza por un profundo contenido intelectual sobre la difícil separación entre las nociones del bien y del mal, y por un estilo brillante e inquietante.

En 1945 editó 'Uno y el universo', una colección de artículos políticos y filosóficos en los que censura la moral neutral de la ciencia heredada del siglo XIX. Esta desconfianza en la ciencia le llevó a investigar sobre las posibilidades que ofrecería la literatura para analizar problemas existenciales. Fruto de ello fue la novela 'El túnel' (1948), en la que el narrador describe una historia de amor y muerte en la que muestra la soledad del individuo contemporáneo. 'Sobre héroes y tumbas' (1961), considerada la mejor novela argentina del siglo XX, fue su siguiente obra y lo consagró como escritor universal.

Aún siguió reflexionando sobre las posibilidades de la novela en 'Abaddón, el exterminador' (1974), de corte autobiográfico y de argumento apocalíptico. Su compromiso civil, en defensa de la democracia y del respeto a los derechos humanos, se muestra en ensayos como 'El otro rostro del peronismo', 'El caso Sábato', 'Torturas y libertad de prensa', 'Carta abierta al general Aramburu' (1956) y 'La cultura en la encrucijada nacional' (1976).

Toda su reflexión sobre la literatura y especialmente sobre la novela la ha plasmado en ensayos tan significativos como 'El escritor y sus fantasmas' (1963) y 'Aproximación a la literatura de nuestro tiempo: Robbe-Grillet, Borges, Sartre' (1968).

ERNESTO SABATO Y EL NOBEL DE LITERATURA 2009


Propuestos por la SGAE
Miguel Delibes, Francisco Ayala y Ernesto Sábato, candidatos al Nobel de Literatura 2009

MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Consejo de Dirección de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) ha propuesto a la Academia Sueca los nombres de los escritores Miguel Delibes (Valladolid, 1920), Francisco Ayala (Granada, 1906) y Ernesto Sábato (Rojas, Buenos Aires, Argentina, 1911) como candidatos al Premio Nobel de Literatura de 2009 "por su gran compromiso social".

La decisión del Consejo, previa petición de la Academia Sueca adoptada en su última reunión, se basa en los acreditados méritos literarios de cada uno de estos tres autores universales, que los hacen acreedores del galardón más prestigioso de las letras.

La entidad de gestión de derechos de autor presentó la misma terna a la Academia Sueca en 2007 y 2008 para un galardón que finalmente fue a parar a la británica Doris Lessing, y al francés Jean-Marie Gustave Le Clézio, respectivamente. Desde hace ya algunos años, la SGAE propone, por petición expresa de la Academia Sueca, las candidaturas de escritores en lengua española al Nobel de Literatura.

En caso de que alguno de ellos fuera distinguido, se sumaría a la relación de escritores en lengua española que lo obtuvieron con anterioridad: Octavio Paz (1990), Camilo José Cela (1989), Gabriel García Márquez (1982), Vicente Aleixandre (1977), Miguel Ángel Asturias (1967), Juan Ramón Jiménez (1956), Gabriela Mistral (1945), Jacinto Benavente (1922) y José Echegaray (1904).

Friday, August 29, 2008

TRAVESURAS DE LA NINA MALA de MARIO VARGAS LLOSA




El mismo título de la última novela de Mario Vargas Llosa da un buen indicio de lo que es: un libro malo que bien podria haberse titulado “Las divagaciones de la novela Mala”

Tipo de producto: Novela de una narración lineal y predecible, de entretenimiento light y pedestre.
Esta última novela de Mario Vargas Llosa, no me ha gustado, me ha chocado, no tanto por su argumento tragicómico (recordemos Pantaleón y las visitadoras o La tía Julia y el escribidor), sino porque su estilo narrativo en esta obra es mucho más convencional, y mas comercial. Esto no seria necesariamente malo si viniera de un pseudonarrador o de un autor menor, pero viniendo de Mario Vargas Llosa, molesta y decepciona.
En sus libros anteriores solia dejar fluir el texto narrativo y el diálogo en un solo plano, haciendo que el lector no interrumpiera su lectura para pasar al plano del directo, procurando, con este recurso, que el lector se sumerjiera en la historia hasta el punto de que la narración y el diálogo integrado en ella lo envolvieran como si se tratase de un testigo mudo, participante del relato. Desafortunadamente este estilo tan vargasllosiano no se encuentra aquí, en Travesuras de una niña mala.

Estructura de la novela: El libro se divide en siete capítulos, cada uno de los cuales tiene como escenario una gran ciudad con ciertas particularidades históricas: el París revolucionario sesentero, el Londres rompedor de prejuicios de los setenta, Tokio con toda la tecnología puesta al servicio del placer, Madrid con ese crisol de culturas y artistas que es Lavapiés, y entremezclado entre todos los escenarios históricos la historia reciente de Perú, desde los años 50 hasta el gobierno de Alan García que llega a 1990. Me causa mucha gracia las lecciones de historia socioeconómica peruana que pretende darnos y sobretodo las críticas que hacen evidente la consabida rivalidad política del gran escritor con el presidente Alan García).

El tema central es el amor obstinado y casi masoquista de un hombre aburrido y sin ambiciones, por una mujer inescrupulosa y escurridiza que entra y sale de su vida de maneras inverosimiles durante mas de 40 anos, los que van de la adolescencia temprana del personaje hasta la vejez. Cuarenta años, aproximadamente, en que Ricardo tiene dos obsesiones. una cumplida: vivir toda (o casi) toda su vida en París, y otra inalcanzable: “la niña mala” Que tal el apodito?

Protagonistas:

Ricardo: Un hombre esclavizado, no tanto por la niña mala, sino por sí mismo; es víctima de una obsesión en realidad vacía, inmotivada, turbia pero sobretodo insustancial. En el fondo no sabemos nunca por qué razón Ricardo amará toda su vida (intermitentemente, eso sí), a esta niña, joven, mujer madura, vieja, que se le va presentando siempre con una característica indiferencia hacia él, con un distanciamiento no disimulado, manipulándolo claramente y con un evidente desprecio hacia lo que él es y sobre todo, valorándolo (negativamente), por lo que no tiene: dinero, poder, glamour e incluso, crueldad.

La nina mala: Mujer supuestamente llena de energía interior, pero sin la menor carga de psicología que resulta irritnte, anda por la novela como personaje enloquecido sin llegar a ningún punto, es decir, un personaje que jamas seduce.
Apareció en la vida del protagonista cuando era niña (fingiendo ser chilena), a la que reencontró en París como proyecto de guerrillera, que fue después esposa de un funcionario de la UNESCO para más tarde asumir la identidad de mujer de un rico criador de caballos inglés, y que terminó siendo la prostituta y la mula de un gángster japonés que la maltrata espantosamente y la hace pasar por las aduanas de medio mundo llevando vaya usted a saber qué. A pesar de aparecer en toda la novela, no acaba de encarnarse ante mis ojos de lectora más que como un ente, una mitómana, una mujer sin hondura emocional que se pasea por Perú, París, Newmarket, Tokio, y Madrid para torturar a ese pobre muñeco o marioneta al que, significativamente, llama “pichiruchi”.

Estos tropezones amatorios presentan no sólo diálogos ataviados de frases entonadas, sino que están precedidos de una reiterada adjetivación: “niña mala”, niño bueno”, el famoso, vomitable y repetitivo “pichiruchi”, ex chilenita, ex guerrillera, ex Madame Arnoux, ex Mrs. Richardson, ex Kuriku” sinceramente provocan una patada en el estomago del lector. Para colmo las desapariciones de este personaje femenino no se aclaran en su integridad pero si ayudan a extender la necesaria amplitud discursiva, característica imperante en las publicaciones de la “prestigiosa” editorial española Alfaguara.

Personajes secundarios: Son esos amigos que a la postre, como sin querer, va encontrando Ricardito en su camino, cada uno de los cuales abandera una causa y una época: Paúl, el peruano revolucionario que conoció en París, y que años después murió en el intento de trasladar la revolución cubana a Perú; Juan Barreto, el hippy peruano de su etapa londinense, pintor de caballos de carreras y una de las primeras víctimas del emergente SIDA; Salomón Toledano, talentoso interprete, infantil, locuaz y a ratos torpe y grosero que acaba como un honorable samurai, suicidándose en Japón. Estos personajes secundarios tienen un ambiente específico y aparecen y desaparecen de una forma absurda por lo que no me llegan a parecer jamas de carne y hueso. Sus metamorfosis, que permanecen casi siempre a la vista y a la acción misma están metódicamente ligadas al escenario concreto donde ellos se encuentran, pues, siguiendo el designio del autor. Puros incidentes dispuestos para funcionar in situ y un cierre bastante definitivo. Y cuando ya creía que el autor había hecho una especie de conjuro para que todos estos personajes de su vida muriesen, aparece el alegre y optimista matrimonio formado por Simon y Elena Gravoski, que junto a su hijo adoptivo Yilal disque aportan un poco de optimismo a la vida gris de este hombre. Que bien no?, Para que sirvio ese episodio del niño mudo? No es acaso cursi, trapacero descuadrado y sentimentaloide? Seguro pretendia hacernos creer que la nina mala tenia su lado bueno y tierno, no? Perdon, pero no consigue convencer de la entidad de la niña mala, ahora convertida (eso sí, fugazmente), en la buena vecinita que juega al ajedrez con un traumatizado niño vietnamita. ?????


Es una historia facilona, que para colmo encierra una propuesta ideológica que me parece chata, poco matizada y muy tendensiosa. Con una fácil lectura por el uso de lenguaje sencillo, directo y totalmente explícito y mas en lo referente a los episodios que involucran sexo, el escritor lleva la temática de esta novela a un universo de casualidades que, hacen que su trama sea sumamente inverosímil, y en adición, poco convincente.
El problema de un argumento como éste es que a la segunda vez que la niña mala emprende el vuelo, metamorfoseándose después, ya sabes lo que va a ocurrir. Es un ave pasajera, es un camaleón. Aparecerá de nuevo en la vida de Ricardo en el momento menos esperado, asumiendo un nuevo aspecto, una lengua (de adopción) prestada, una identidad nueva, un nuevo amante, un nuevo nombre, y Ricardo volverá a caer en el lazo que le tiende, tropezando siempre con la misma piedra: la frialdad y la fugacidad del encuentro con la niña mala, el sufrimiento subsiguiente, la confirmación de que es ésta la esencia de su amor por ella: su transitoriedad, o mejor dicho su superficialidad.

Esta sarta de encuentros y desencuentros se tornan endebles y poco creíbles, por cuanto suponen reuniones casuales antes que acciones cotidianas.
En fin, una historia que acaba repitiendo hasta la náusea una situación básica: ella se irá para reaparecer transformada, mientras él la seguirá y se plegará a sus deseos con toda docilidad en medio de algún que otro exabrupto. Y seguiran las lineas unas tras otras para después situarse en un decrescendo de lectura ultrasencilla y aburrida, como una bebida ligera a la que le hubiera dado más cuerpo evitar tanto diminutivo, así como el uso abusivo de la palabra “pichiruchi.”

El gran problema es de que Travesuras de la Niña Mala no se sostiene a si misma. Las casualidades que van uniendo la vida de sus dos protagonistas, base en gran medida de la historia, nunca son creíbles y dejan huecos enormes. Y Don Mario siempre dijo que una de las características más importantes de una buena novela es la verosimilitud. El lector tiene que creer que es verdadero lo que le estás contando. Entonces? Por que? Por que esta sarta de idioteces inverosimiles?
Y notese que no es que lo inverosimil no pueda ser literatura ok? Lo que sucede es que debes ser muy grande como escritor para saber jugar con eso de lo increible. En nuestros dias, el genio, el gran senor que nos mete en un mundo donde lo más improbable y lo mas inverosimil se vuelve creíble es el maravilloso Paul Auster. Solo pero solo el, es quien en un mar de las más absurdas casualidades logra envolvernos y creerle sin robarle un apice de calidad literaria a sus escritos. Lamentablemente Vargas Llosa no lo logro en esta novela.

Para terminar, que tal la última parte de la historia? Agrega algo interesante que en un viaje a Perú, Ricardo por fin consiga establecer la verdadera identidad de la falsa chilenita y logre saber el verdadero nombre, o tal vez debo decir el nombre original, o el primer nombre de esta mujer? Y enseguida la historia de la destrucción de ese mito, que horror, es lastimosamente pedestre y previsible: el bueno de Ricardito se gasta todo lo que tiene en curar a la niña mala de las animaladas que le ha hecho el japonés, y ella, naturalmente, una vez curada, vuelve a irse. Enseguida viene ese laargo y aburrido epílogo (que comienza con la historia de Marcella) Tambien sin aportar nada profundo y substancial a la historia. Si; esa Marcella igual de fugaz y banal como la misma escritura actual de Vargas Llosa


Ambientacion: Ambientada en Paris y varias ciudades mas que con un fondo disque historico hecho a brochazos, y muy de acuerdo a sus preferencias politicas segun el nos pone al tanto de lo que sucedio en Paris en los 60’s o despues en Londres y luego nos da una catedra socio-economica del Perú de esa epoca a través de diversos personajes: Paúl, y especialmente el tío Ataúlfo.. Por lo tanto Vargas Llosa nos hace entrega de una novela no relacionada con la historia, si no con su memoria y su ideologia de ultraderechista.

El estilo que nos ofrece no es precisamente brillante. la visible abundancia de frases-cliché como “me dejó hecho una noche por muchos días”, “se dedicó a mí en cuerpo y alma” (p. 56), “ya se habría mandado mudar con la música a otra parte” (p. 167); “jugando de tú a tú con Yilal” (p. 232), “Se me quedó mirando con una carita de mosquita muerta” (p. 368). (Que sencillote se ha vuelto don Mario). Para colmo estas frases forman parte del vocabulario erótico de Ricardo, que ella, apropiadamente, llama “huachaferías”. Irreemplazable peruanismo que denota lo cursi, de mal gusto, ridículo por pretencioso. Caben, por lo tanto, dentro de diálogos de un heroe romantico escritos por un gran autor? Sobretodo cuando se supone que Ricardo, el exclusivo narrador de la novela, cuenta otras situaciones o describe ambientes cosmopolitas, traduce cuentos de Chejov, visita la casa de Kavafis en Egipto, etc, etc. Entonces si es un hecho de que es un hombre con claros intereses intelectuales y estéticos, nada “huachafos” por que pronuncia esas horrorosas frases? Alguien que me lo explique, es Ricardo un hombre sensible culto e intelectual o es un hombre mediocre e ignorante?

Lo que me pasó con este libro, es que muchas veces tuve que releer la portada para confirmarme que realmente era una novela de Vargas Llosa, lo juro! Estuve tan confundida, y me decia a mi misma, debo acaso de partir de la base de que Vargas Llosa sabe lo que hace? Sera posible que este icono del boom latinoamericano; ahora nos sale con este mamotreto best-sellero? ¿De verdad Vargas Llosa escribió esta novela rosa, predecible, melcochosa, tan hueca? Por que a mí no ha conseguido convencerme en ningún momento de que estoy leyendo la historia de un gran amor y de un gra autor?.

Creo que trabajo esta novela dentro de marcos más propios de las convenciones del relato tradicional, sin el efecto intensificador de los contactos entre dos o más madejas narrativas simultáneas: aquí todo marcha hacia adelante y viaja, acompañando a los protagonistas, pero sin cambiar de nivel; contemplamos los hechos siempre desde el mismo ángulo. Escritura digna de un pseudo-escritor de Hollywood, ya saben, el tipico escritor que se sabe de memoria la formula para atrer masas, que sirve a un publico mediocre, ignorante y holgazan para las lecturas profundas que lo hagan pensar. Un publico que demanda todo facil y breve, pero eso si, historietas con mucha emocion, y ademas con finales faciles rapidos y espectaculares. Ok, para ese publico escribe y sirve ahora en esta etapa de su vida Don Mario Vargas Llosa.
Pero bueno, la historia entretiene y se lee de un tirón (2 noches me tomo consumirla y digerirla; y si no se le pide más a un libro, cumple y estara dentro de la sección de baratijas del mercadillo Vargas Llosa.

Ya no me queda duda de que en un mundo globalizado, en donde lo más importante es vender, y que te lea un publico amplio aunque en su mayoria ignoranton, hasta los considerados grandes escritores sucumben ante las necesidades editoriales, de un mercado cada vez más competido. Ni hablar, la editorial Alfaguara ha venido a menos porque muy pronto sus intereses comerciales han sobrepasado los estándares de calidad, ahora cualquiera que sea uno de sus autores de cajón puede darse el lujo de entregar el primer voluminoso borrador mal hecho de una idea, y la editorial se encargará de tratar de convertirlo en un best-seller.

Lo que mas me apena es que con el tiempo, la literatura de Vargas Llosas se ha hecho más comercial, más cercana, digamos, a eso que llamán "lector común".
Tal vez haya ganado más lectores, pero su literatura ciertamente ha perdido en calidad si se compara con sus obras mayores.
¡Qué mal plan! Sobre todo para los lectores serios que sólo quedan cada vez más decepcionados.

Ultimo comentario: Los encuentros fortuitos de esta historia, los hemos encontrado antes en otras obras, obras de arte, como Rayuela (pero ¡qué diferencia!). También en el cine (L’ennui -1998-) trata de una historia muy similar). En Rayuela Julio Cortazar provoca que te enamores de la Maga y de Horacio, que vibres junto con ellos, junto con sus pensamientos, emociones y conflictos existenciales. Y que decir de una historia de amor que dura mas de 40 anos? Ya Garcia Marquez nos deleito en su momento con “El amor en los Tiempos del Colera” y lo hizo de una forma bellisima y convincente. Luego entonces, alguien que me explique, por que habra querido Vargas Llosa a estas alturas de su vida robar ideas y mal contarlas en una literatura tan pedestre?

Friday, August 8, 2008

COMIENDO EN MUNICH.



El equivalente en Múnich del newyorkino Dean & DeLuca es el Alois Dallmayr, una tienda, café, restaurante que reúne una buena parte de las delicatesses del mundo y de la región bávara. Supera a la primera en su hermoso local (aunque no en variedad mundial de productos), Dallmayr es la mejor tienda gourmet de la ciudad. Está al mismo nivel que Fauchon en París, o que Fortnum & Mason en Londres. Esta tienda era la proveedora de la realeza bávara. Se trata de toda una institución en el Casco Antiguo, muy conocida por sus elaborados escaparates y deliciosos desayunos con champán en el café.
Puedo describirla como una antigua e inmensa tienda de luz cálida en el que se respira tradición: está abierta desde 1700
Posee diversas áreas en la que hallamos: fina chocolatería y bombonería de la casa, dulces y pasteles, una bodega de vinos y diversas bebidas alcohólicas y panadería. Una de las más lindas es en la que se vende café recién tostado, proveniente de todas partes del mundo, guardados en contenedores antiguos de porcelana, bellamente pintadas y, justo al frente queda el área de té.
En otra ala del Dallmayr se encuen- tran las frutas, quesos, embutidos, carnes, foie, junto a un mostrador en la que se venden canapés y comida para llevar o comer justo allí, en unas mesitas pequeñas, en la que uno se puede tomar una copita de vino y conversar, paladeando alguna de estas exquisiteces.
Arriba queda un gran café de decoración clásica en donde se puede comer o tomar un café y un postre, que no llegan al refinamiento de los franceses pero son ciertamente ricos. También tienen un área de restaurante y un área especial para comprar cigarros y habanos. Los precios dependen, claro está, de lo que compremos, pero tomar un café o un canapé no resulta costoso, igual que el resto de la ciudad. Los fines de semana suele estar tan a tope que resulta agobiante para muchos. Pero es el sitio ideal para rendirle culto al placer de comer y beber con 300 años de tradición respaldándolos.