Friday, November 23, 2007

Dietrich Schwanitz


«La literatura propicia la comunicación sin fronteras»
Tambien podria decirse que:
“La Cultura facilita la tolerancia, el entendimiento y la comunicación sin barreras”
El autor alemán Dietrich Schwanitz dejo un libro «brújula» sobre todo lo que hay que saber .Fue catalogado por unos como «un libro atrevido» que osa decir lo que es culto y lo que no; valorado por otros como una propuesta valiente y concreta para tiempos de confusión en el ámbito de la enseñanza, el libro del alemán Dietrich Schwanitz La cultura, todo lo que hay que saber lleva vendidos en todo el mundo más de un millón de ejemplares.

Hay crisis en la educación superior mundial, en la enseñanza. Muchas de las reflexiones que se encierran en La cultura parten de la experiencia alemana, pero se pueden aplicar a España, Mexico y a otros países europeos, donde el bajo nivel de formación es evidente.

«En el caso concreto de Alemania», señaló Schwanitz, «el sistema educativo está muy fragmentado, más después de la reunificación, y es necesario encontrar el modo de que los estudiantes puedan comunicarse y orientarse a través de unos conocimientos afines».

Fue precisamente esta apreciación, reforzada mientras impartía sus clases de Filología inglesa en la Universidad de Hamburgo, lo que llevó al autor a plantearse la necesidad de escribir esta guía cultural, esta especie de brújula que orienta al lector en distintos campos del saber: desde la Historia a la ciencia, pasando por la política, la literatura, el arte, la música...
Carácter divulgativo
Un libro, en fin, de carácter divulgativo, para todos los públicos, que debe ser tomado, como «un punto de partida para seguir estudiando e investigando en lo que más interese a cada cual».

Lo que da unidad a la entrega, lo que la dota de sentido, es que todas las lecturas recomendadas tienen que ver con la construcción de la época moderna, «con el desarrollo de los conceptos que en un momento dado cambiaron el mundo», afirma Schwanitz, quien lanza en el prólogo las siguientes preguntas: «¿Qué ha dicho Heidegger que no supiéramos ya?», «¿Dónde estaba el inconsciente antes de Freud?».

Cuestiones que encuentran respuesta en un libro que pretende ofrecer una visión global de la cultura europea, alentando a la reflexión.

«Tenemos que saber»,Tenemos que acercarnos a la literatura para apreciar los enigmas, el lado más íntimo de nuestra sociedad. Si conocemos a Don Quijote, a Hamlet, a Fausto, a tantos otros personajes de la literatura, podremos sentar bases de comunicación más allá de las fronteras nacionales».

La cultura ayuda al hombre a conocerse a sí mismo y a percibir los constantes cambios de la sociedad, se sostiene en este libro que puede ser criticado como cualquier obra que tienda a establecer canones del saber, pero uno de cuyos méritos radica en que anima al lector a luchar contra tanta información basura de carácter efímero y a reflexionar sobre el poder de los medios, sobre la necesidad de controlarlos.

Y todo eso sin olvidar su aspecto irónico, de juego, «algo fundamental», según Dietrich Schwanitz, para quien la solemnidad y la seriedad excesivas han hecho muy poco a favor de la cultura. En este sentido, el libro incluye un curioso capítulo en el que se hace repaso a todo aquello que no habría que saber: conocer con todo lujo de detalles los chismorreos y vidas de los personajes publicos, las historias del HOLA por ejemplo, o las incidencias de los reality-shows o concursos televisivos, «a no ser que se hable de ellos como parte de un estudio sobre los medios de comunicación de masas».

No comments: